FUNCIÓN DEL TAPÓN DE RADIADOR
En ediciones anteriores hemos comentado sobre las funciones del tapón del radiador, las cuales repasaremos en esta ocasión, enfocándonos en la seguridad y protección de nuestro vehículo.
El tapón está diseñado para mantener la presión del sistema de enfriamiento de motor en los valores adecuados. La mayoría de los vehículos actuales, trabajan como sistema cerrado; este sistema permite que el líquido enfriador absorba mayor temperatura que un sistema abierto. Con ello se puede evitar que el sistema se sobre caliente y que esto provoque un proceso de evaporación. Con el calentamiento del líquido se empieza a elevar la presión dentro del sistema. Un buen tapón de radiador debe permitir que la presión del sistema se eleve hasta cierto punto.
Este aumento de presión se realiza para permitir que el líquido pueda soportar más temperatura (2oC más por PSI) antes de evaporarse. Pero el sistema no debe permitir que la presión se exceda, por ello el tapón debe tener una válvula que libere la presión por arriba del valor de calibración; esto lo hace permitiendo que parte del líquido salga y llegue al depósito de recuperación, liberando la presión del sistema.
Cuando por distintas causas, como aumento de velocidad, bajando una pendiente, etc. el líquido se enfría rápidamente, ocasionando que la presión se reduzca, esto cierra la válvula de alivio, provocando que el sistema se quede con menos líquido. En ese momento se genera un vacío en el sistema que permite que otra válvula dentro del tapón admita el retorno del líquido procedente del depósito de recuperación, nivelando los niveles de líquido dentro del sistema.
¿CÓMO Y POR QUÉSE DAÑA EL TAPÓN?
La causa principal que origina que el tapón de radiador se dañe es el uso de agua cómo único líquido enfriador. El agregar líquidos antioxidantes al agua no evita este problema; la única forma de evitar daños al tapón por oxidación es utilizando un verdadero coolant, con una mezcla de 50% de EthyleneGlycol y 50% de agua. Además, las condiciones de manejo pueden provocar que el tapón se dañe por exceso de uso, por ello se recomienda revisar el estado del tapón cada 5,000 kms.
SELECCIÓN CORRECTA DEL TAPÓN
Para seleccionar un tapón de radiador, además de seleccionar una marca reconocida (no todas las marcas pasan las pruebas de soporte y liberación de presión), debemos colocar el tapón que asiente adecuadamente en la boca del radiador. Existen varios diámetros de tapón, (Figs. 1, 2 y 3). Asimismo, debemos escoger el tapón con la presión de liberación adecuada al sistema; si escogemos uno con mayor presión, corremos el riesgo que los elementos del sistema se dañan por sobre presurización y, si escogemos de menor presión, corremos el riesgo de que el líquido no absorba el calor necesario del motor y se genere un sobrecalentamiento.
CUIDADOS AL ABRIR EL TAPÓN
Debido a que el sistema de enfriamiento es del tipo cerrado, es importante el esperar que el sistema se enfríe previo a quitar el tapón, de lo contrario se corre el riesgo de sufrir quemaduras causadas por la salida de líquido a presión. Esto se puede evitar si utilizamos el tapón tipo Lev-r-Vent, el cual tiene una palanca que permite liberar la presión del sistema sin necesitar de quitar el tapón. Este es un tapón recomendado en vehículos de alto uso o sometidos a condiciones extremas de utilización. (Fig. 4)
